Electrodos y accesorios en electroestimulación.
En la electroestimulación, el sistema de transmisión de corriente del generador al músculo debe atravesar la piel y cruzar la barrera cutánea. El principal obstáculo será el aire, ya que éste no permite el paso de la corriente. Como podemos ver en nuestro entorno, no hay electricidad en el aire, de lo contrario los cables eléctricos que pasan por encima de nuestras cabezas harían el aire insoportable.
Para que la corriente fluya, hay que utilizar un aglutinante que garantice esta función. Los primeros electrodos eran de metal con agua, lo que aumentaba el riesgo de quemaduras, seguidos de bolsas de tela a modo de esponja que se mojaban abundantemente. No fue hasta la década de 1970 cuando llegaron los primeros electrodos adhesivos. Rápidamente se convirtieron en la forma más eficaz y cómoda de hacer electroestimulación, sport-elec por supuesto adoptó este principio desarrollando sus propios electrodos.
Utilizando tejidos de hilos de carbono sobre los que se coloca una capa de gel hidrófilo adhesivo que no se pega. De hecho, si el gel es muy pegajoso, el electrodo se destruirá la primera vez que se utilice al retirarlo. Por ello, la calidad del gel utilizado es muy importante, ya que la adhesión más perfecta a la piel permitirá eliminar el aire y que la corriente fluya perfectamente sin ofrecer resistencia. El músculo en cuestión recibirá la corriente y se contraerá sin que usted sienta ningún cosquilleo.
Para perfeccionar este sistema Sport-elec ha creado accesorios para contener los electrodos y facilitar la instalación durante las sesiones, la rapidez de instalación de las prendas de electroestimulación permite un uso más frecuente de los aparatos y desempeña un papel importante en los resultados que se pueden obtener.