Esta es la cuestión, ¿ver los músculos moverse es una señal de que estamos haciendo deporte o sólo un acto reflejo del músculo que recibe un impulso eléctrico? Durante 20 años hemos visto a bellos atletas mover sus músculos gracias a sport-elec, Compex, slendertone... ¿Cuál es la realidad de estos efectos visuales si los comparamos con los movimientos físicos realizados durante una actividad deportiva?
Hay pruebas clínicas que demuestran la eficacia de la electroestimulación, pero ¿podemos hablar realmente de deporte? Las pruebas muestran resultados en el refuerzo muscular, en la recuperación activa tras los esfuerzos, en el alivio del dolor mediante corrientes tens que contrarrestan el mensaje cerebral del dolor, pero nada prueba que se haga deporte con un electroestimulador.
De un tiempo a esta parte, la moda del miabodyteck y del movimiento asociado a los impulsos eléctricos de los generadores ha cambiado la situación, ahora se habla de actividad deportiva asociando el movimiento a la electroestimulación. ¿Es realmente deporte?
Realizar una sesión de EMS (electroestimulación muscular), que no es más que una sesión de electroestimulación. No hay duda de que si lo pruebas tendrás la sensación de haber realizado una actividad física porque habrás acompañado las contracciones eléctricas con contracciones voluntarias de tus músculos y esto habrá amplificado el movimiento recíproco de los dos fenómenos voluntarios e involuntarios. Tus músculos habrán trabajado, es seguro, y se habrán desarrollado o despertado por efecto de las contracciones que probablemente nunca lo habrías hecho sin la técnica de electroestimulación asociada.
Pero, ¿es deporte? Yo diría que no porque el deporte es otra cosa. El deporte combina el trabajo del cuerpo con una actividad física supervisada en una disciplina deportiva que combinará el cuerpo y la mente, lo que permitirá una expresión física que puede asociarse a un objetivo de rendimiento, de bienestar, de superación, ya sea en el atletismo, la gimnasia o la equitación, en la que entrará en juego la asociación con el caballo. Así pues, la electroestimulación asociada a los movimientos no es deporte, es un medio de preparación y desarrollo muscular eficaz para hacer deporte o simplemente para mantener la forma física, el tono muscular y la vitalidad, pero no es deporte.
Además, las nuevas gamas de electroestimuladores Sportelec, que combinan accesorios o prendas de electroestimulación con movimientos, no hablan de deporte, sino de preparación deportiv